
¿Qué cambios traerá la exterminio de las PASO y cómo afectarán a la ciudadanía?
Elecciones
Fernando Velezmoro Pinto, exsecretario común de la ONPE, advirtió de los riesgos de la nueva norma
El extremo jueves, la presidenta Dina Boluarte y el presidente del Gobierno, Alberto Otárola, promulgaron la norma que modifica la Ley 28094 o Ley de Organizaciones Políticas en cuanto a las elecciones primarias, y la inscripción de partidos políticos y movimientos regionales; y la Ley Orgánica de Elecciones.
Esta modificación partió desde el Parlamento, que aprobó el respectivo parecer el pasado 14 de diciembre y envió la autógrafa al Ejecutante. El Gobierno tuvo hasta el 19 de enero para observar dicha propuesta, pero optó por su oficialización, pese a las críticas de los propios organismos electorales.
Entre otros cambios, la nueva ley elimina la responsabilidad de las elecciones primarias abiertas simultáneas (PASO) y reincorpora la modalidad de selección de candidatos a procesos electorales a través de delegados, facultando a las organizaciones políticas a nominar cualquiera de los modos a discreción.
Asimismo, retorna a la inscripción de partidos políticos y movimientos regionales a través de la presentación de una relación de adherentes. Para el primer caso, esto debe ser «no último al 3%» del total de sufragantes a nivel franquista; y para el segundo «no último al cinco por ciento (5%) de los ciudadanos que sufragaron en las últimas elecciones de carácter franquista, adentro de la circunscripción».
Por otra parte, da un plazo de dos abriles «para la cosecha de firmas de adherentes y la presentación de la solicitud de inscripción» al Comisión Doméstico de Elecciones (JNE).
Con estas modificaciones, cerca de preguntarse cómo repercuten en el ámbito de representatividad política de la ciudadanía. Al respecto, RPP conversó con Fernando Velezmoro Pintoexsecretario común de la Oficina Doméstico de Procesos Electorales (ONPE).
«Es un retroceso» en la décimo ciudadana
Vélezmoro Pinto Señaló que los organismos electorales se pronunciaron en contra, porque «lo han calificado de retroceso en la reforma electoral orientada a la décimo política de los ciudadanos».
«No olvidemos que esta reforma, admitido el 2019no se ha implementado, en los hechos, en ningún proceso electoral, desde ese año hasta el momento”, indicó.
«Lo que teníamos hasta ayer del 2019, y que vamos a tener a partir de ahora, es que los partidos políticos definían su modalidad para distinguir las candidaturas, y se nos presentaba a los ciudadanos el ‘menú‘ el dia de las elecciones. Lo que ha ocurrido esta semana, con la promulgación de la norma, es retornar al esquema precedente, por eso se palabra de un retroceso”, explicó.
El entendido demostró que la norma «le devuelve la potestad a la ordenamiento política para concretar qué tipo de proceso electoral interno debe padecer a mango» para nominar a sus candidatos electorales.
«Para eso, contempla tres modalidades: la antigua y generalizada modalidad de disyuntiva a través de delegados; las elecciones cerradas, solamente por afiliados; y las elecciones abiertas o PASOpero de modo muy restringida», aseveró.
«El gran problema -además de tener unas PASO restringidas en el papel o nominalmente- es que, para participar en las PASO, primero la ordenamiento política debería concretar si esa va a ser la modalidad que utilizará para la selección de candidaturas (…) Resulta obvio que si las organizaciones políticas tienen esta escuela para concretar el tipo de modalidad (…), elegirán uno menos gravoso en términos logísticos y que permita tener control de los integrantes de la repertorio de candidatos», escribió.
Por tal motivo, el exsecretario común de la ONPE resaltó que se alcahuetería de «un retroceso en el derecho de la décimo política de los ciudadanos».
«Con esta contrarreforma, las organizaciones políticas tienen el poder para concretar el tipo de proceso tolerante interno. Resulta más que obvio, porque así la experiencia lo ha señalado, que seguirán eligiendo el proceso de selección a través de delegados partidarios», subrayó.
El retorno de las listas de adherentes
Por otro flanco, Vélezmoro Pinto advirtió los riesgos que conlleva el retorno de las listas de adherentes para la inscripción de organizaciones políticas.
«Los requisitos ayer del 2019 eran incorporan una gran cantidad de listas de adherentes (…) válidamente reconocidos como tales por los organismos electorales, es afirmar, pasaban por un proceso de demostración de las firmas (…) La reforma del 2019 lo que hizo fue eliminar el requisito de los adherentes, porque no tienen ninguna vinculación con el partido político, y exigir más correctamente un requisito de afiliados, rodeando de 0.1 % de afiliados que es rodeando de 24 mil afiliados”, indicó.
«Los adherentes trajeron como consecuencia lo que se denominó taller de firmascomo era tan gravoso realizar campañas de cosecha de firmas, las futuras organizaciones políticas (…), organizaban fábricas de falsificación de firmas», agregó.
El entendido sostuvo que, para evitar «la proliferación de partidos políticos, lo que se hizo fue implementar las PASO como primer filtro».
«Todos estos partidos políticos con inscripción vivo solo podrían participar en un proceso electoral plenamente si es que han tenido por lo menos una décimo de 1,5% de ciudadanos en las PASO«, indicó.
«Ahora, se ha eliminado las PASO y los aproximadamente 35 partidos políticos con los que se va a contar en el próximo proceso electoral tienen la posibilidad de presentar sus candidaturas directamente, ya la vez se ha elevado el requisito para nuevos partidos políticos retornando a la modalidad de las 700 mil firmas de adherentes», añadió.
En ese sentido, Velezmoro sostuvo que «se ha eliminado la posibilidad de que los ciudadanos participen en la selección de candidaturas, por lo que, a partir de ahora serán las propias organizaciones políticas las que deciden la modalidad para distinguir las candidaturas que se presentan en los procesos electorales, y se ha vuelto a elevar la valla para que ingresen nuevos partidos políticos».